martes, 31 de octubre de 2017

LA ALCAZABA DE MÁLAGA


LA ALCAZABA DE MÁLAGA 


Por Elisa Simon 




"Se asienta en el monte como en un trono y Dios la ha colocado en un lugar excelso; sus muros y sus recintos son dobles, su almenara se alza sobre la cima del bendito monte sus torres están próximas unas de otras, sus escaleras son altas y sus puertas bien defendidas." 

(Ibn al-Jatib en "el parangón entre Málaga y Salé" revista al-Andalus, vol II, 1924 Artículo de don Emilio García Gómez) 





" ... la ciudad fue fundada por hombres de la antigüedad y la mayor parte de ella está junto a dos diques o puentes construidos por los antiguos. Los puentes están en dos albuferas, que hay allí y fueron hechas con sillares de roca ... la Alcazaba está al este de la medina y que la rodea una muralla de piedra y es extremadamente fuerte e inexpugnable ... " 


(al-Himyari en "cuatro ciudades de al-Andalus y un solo autor" revista de Centro de Estudios Históricos de Granada y su reino, 4, Granada - artículo de J. Vallvé Bermejo)



Desde cualquier lugar de la ciudad de Málaga se vislumbra su Alcazaba, allí, sobre un cerro, vigilante y protegiendo a su gente. Málaga siempre gozó de un enclave privilegiado para el comercio mediterráneo. El suelo fértil, regado con generosidad, ofrecía hermosos vergeles, huertas, zonas de cultivo, recibiendo la brisa del mar y protegidos del aire por las montañas. Uno de los viajeros medievales que la visitaron dejó escrito:  

Ibn Battuta en su Rihla nos relata: " ... Málaga, una de las capitales de al-Andalus y de las más hermosas, aúna las ventajas de mar y tierra y abunda en productos y frutos. En sus zocos se vendía .... higos y almendras que se transportan desde la ciudad y su alzo hasta los países del Magreb y el oriente árabe ... " 

prosigue ibn Battuta con un poema del malagueño ´abd al-Wahháb b. Alí 

"¡Málaga, cuántos higos produces, 
por ti acuden los barcos! 
El médico me prohibió por un mal visitarte 
pero carece de algo parigual a mi vida. " 



La Alcazaba es una mezcla armoniosa de belleza palatina con patios y jardines y la función defensiva propia de una fortaleza. A lo largo de la historia de al-Andalus la Alcazaba se fue transformando y adaptando a sus moradores. La dinastía hammudí, los ziríes de Granada, los Almorávides, los Almohades y los emires nazaríes han ido dibujando la fisionomía de esta imponente fortaleza.  

Según los especialistas, Málaga pudo haber contado con una fortaleza o al menos una atalaya en época califal, cuyos vestigios se identifican con los sillares alternados a  soga y tizón.  




La zona palatina estaba protegida por dos recintos concéntricos amurallados con puertas y las torres que convirtieron esta fortaleza en inexpugnable, adaptándose su construcción a las características del terreno.  


puerta de las columnas, uno de los accesos del primer recinto de la Alcazaba
Es fascinante entrar a la Alcazaba, ascendiendo, a través de la puerta de las Columnas y el arco del Cristo. Parece que la fortaleza me fuera guiando y contando su historia. Es curioso que el arco del Cristo, en época andalusí se llamada "Bab al-miftah", (puerta de la llave) ya que en la dovela clave aparece una llave grabada en relieve, tal como ocurre en la puerta de la justicia del recinto de la Alhambra. 



Una vez atravesadas estas puertas en recodo, el terreno se hace una poco más plano. El patio de Armas se muestra como la antesala de la enorme y reconstruida puerta de los Cuartos de Granada, de acceso recto y flanqueada por dos torres, que da la bienvenida a la zona residencial y de administración.  



A partir de ahí la vista se va hacia todos lados, porque un rincón es más hermoso que el otro. Tres son los palacios que conforman esta zona más alta del recinto y donde los  palacios se articulan entorno a tres patios contiguos, siendo uno de ellos del siglo XI y los otros dos corresponden al siglo XIV. 



La mayoría de los historiadores fechan el inicio de la historia de la Alcazaba, después del año 1031, cuando se p rodujo la abolición del califato de Córdoba. La consecuencia fue la fractura de al-Andalus en reinos de taifas. Málaga se convirtió en capital del reino hammudí, entre los años 1040 y 1057. La dinastía hammudí, descendientes de Idris, el fundador de Fez, habían gobernado al-Andalus desde Córdoba durante la última etapa del califato.


pórtico estilo califal del patio de los Surtidores de la Alcazaba 
Los hammudíes, familiarizados con el arte omeya, pudieron haber llevado alarifes de los talleres cordobeses para construir la Alcazaba de Málaga. 


yesería del siglo XI de la Alcazaba de Málaga 
Esta teoría podría explicar la decoración del pórtico del patio de los Surtidores, que guardan cierto parecido con los que se ven en madinat az-Zahra´. Se trata de un pórtico con tres arcos decorados de dovelas alternando yesería y piedra. La yesería muestra motivos vegetales como palmas y tallos.


pórtico estilo califal del palacio del patio de los Surtidores, siglo XI

En la corte hammudí se hablaba de ciencia y se recitaba poesía entre patios, albercas y jardines. Los poetas quizá improvisaban versos inspirados por las hermosas vistas desde el pabellón de la torre de Maldonado. Aquel pabellón-mirador, con hermosa arquería lobulada y entrelazada, abierto por sus cuatro lados se asoma al mar, el puerto y la medina. 


arcos lobulados y entrelazados del mirador de la torre de Maldonado

mirador de la torre de Maldonado
Hacia 1057 el señor de Granada, el zirí Badis, anexionó Málaga a su reino. Cuando tomó el mando de la Alcazaba mandó terminar la gran obra iniciada por sus antecesores. Para ello   aprovechó el material que estaba a su alcance, tal como mármoles, columnas, capiteles, estatuas de las ruinas del teatro romano.


  
Según su nieto, el rey abd Allah de Granada "... fue entonces cuando edificó la alcazaba de esta ciudad, de modo tal como ninguna otra persona pudiera haberlo hecho en su tiempo, abasteciéndola de todo lo necesario para resistir las mayores pruebas y gastando en ella todo lo que había heredado de su hijo y mucho más, ya que, temeroso siempre de que los voraces sultanes de al-Andalus se coligasen contra él, quería convertirla en un refugio seguro donde resistir mientras pudiese .... "  



Los ziríes gobernaron en la Alcazaba, bajo Tamim, hermano del rey abd ´Allah, hasta 1090 cuando los almorávides de Yusuf ibn Tashufin decidieron destituir los reyes taifas, después del desastre del sitio de Aledo. De esta manera, el emir Tamim de Málaga fue el primero en caer y ser enviado al exilio. 

A partir de 1146 bajo los Almohades es probable, que se llevaran a cabo ciertas restauraciones y reformas sobre todo debido a la calidad del material de construcción, que es en su mayoría caliza "fosilífera" procedente de las canteras cercanas al mar, al ser material permeable se degrada con facilidad. Si bien se emplearon los sillares, ladrillo y otros materiales en su construcción.  



En 1279 el emir nazarí Muhammad II conquistó Málaga. Fueron ellos quienes le dieron brillo, esplendor y belleza, más aún, a la Alcazaba y a la ciudad. La medina protegida también por una muralla con cinco puertas, en su interior se dice que tenía unos 15.000 habitantes. 



En tiempos del emir Yusuf I se construyó el castillo sobre yabal faruh, Gibralfaro, el cual estaba comunicado por la Alcazaba por medio de una coracha. 

Gonzalez de Clavijo, viajero del siglo XIV escribió: " Málaga tiene un castillo alto a un otero con dos cercas y de fuera de la villa está otro castillo más alto que le llaman Alcazaba y del un castillo al otro van dos cercas juntas unas con otras." 


patio de los naranjos, palacio nazarí de la Alcazaba
Los emires nazaríes construyeron dos palacios contiguos, ambos articulados entorno a sendos patios; el de los naranjos y el de la Alberca. 
El patio de los naranjos, con bellos pórticos en sus lados más estrechos, tiene dos pequeñas albercas a cada extremo. Las alcobas más largas que anchas casi han perdido su decoración genuina. 


patio de los naranjos, palacio nazarí de la Alcazaba
El patio de la Alberca, recibe este nombre por su hermosa alberca alargada, que ocupa casi todo el espacio del patio. En este palacio, también vemos los pórticos con arcos de medio punto que anteceden a las salas, donde se debieron realizar trámites administrativos. 
Es muy agradable tomar un descanso en estos patios, sentados, se respira un silencio que hace audible la historia de la Alcazaba. 


patio de la Alberca, palacio nazarí de la Alcazaba
patio de la Alberca, palacio nazarí de la Alcazaba
Existe una zona que no es de acceso público y que es sumamente interesante. El barrio de viviendas, compuesto por pequeñas casas con patio central y que disponían de letrinas. El barrio, que tenía un hammam, esta datado en el siglo XI, con un trazado de calles, con una infraestructura para la evacuación de aguas residuales.   



En 1487 la vida de la Alcazaba se truncó. Fue víctima del saqueo debido al olvido. Más tarde se asentaron en ella familias hasta que en el siglo XIX la Alcazaba andalusí se convirtió en la Comandancia de Ingenieros. A partir de 1930 vinieron especialistas sensibles al estado de la Alcazaba y poco a poco fueron limpiando, restaurando y valorando esta fortaleza. 
Es imponente y emocionante caminar entre los patios, atravesar sus puertas, subir a sus torres, seguir los caminos, descubrir detalles y dejar fluir la imaginación y los sentidos para captar su energía. 


BIBLIOGRAFÍA: 

- "Málaga, ciudad musulmana" de Manuel Burgos Madroñero extracto de la revista Jábega, nº15 1976. 

- "La primitiva Alcazaba de Málaga" Basilio Pavón Maldonado 
- "El siglo XI en primera persona, memorias de abd ´Allah ... " traducidas por E.Leví-Provençal y Emilio García Gómez. editorial Alianza tres 
- "A través del Islam" rihla de ibn Battuta . Alianza Literaria 























martes, 10 de octubre de 2017

RABÍ LACTOSUS


Lápida funeraria de rabí Lactosus - Lucena 

Por Elisa Simon 


La provincia de Córdoba ofrece un sinfín de localidades a cual más hermosa, donde la huella andalusí está presente. Es el caso de la bella Lucena, Eli Hossano o al-Yussana, llamada en tiempos andalusíes. Fue una ciudad judía, donde se estableció la Academia talmúdica, viviendo su esplendor entre los siglos X y XI, hasta la llegada de los Almohades. 

Pueden pinchar en este enlace para leer el artículo dedicado a Lucena. pinchar aquí  

El Museo Arqueológico y Etnográfico de Lucena, esta situado en el castillo del Moral, en cuya torre del Homenaje, dicen, estuvo encarcelado el rey Boabdil. Justamente en la torre, dispone una sala dedicada a la época judía de esta ciudad. Entre las piezas que se exponen, me llamó la atención ésta lápida del rabí Lactosus. 

¿Quién era? ¿Dónde nació? ¿Cómo fue su vida? 

Bien, hasta ahora no encontré respuesta, sin embargo, gracias a este hallazgo al menos sabemos que existió un rabino con este nombre y que falleció en Lucena hacia la primera mitad del siglo XI. 


En el año 2007 se realizaron excavaciones arqueológicas en la ronda Sur de Lucena, donde se estaba construyendo una rotonda de la circunvalación. Se halló un cementerio judío andalusí con una superficie total de 1.458,85m2, siendo la necrópolis judía más antigua e importante hasta ahora.  El yacimiento se extiende sobre una suave pendiente en la ladera del cerro Hacho y a unos 700m de la muralla medieval. 

Fueron encontradas un total de 346 tumbas, cada una adaptada a la topografía del terreno. Las excavaciones e informes fueron realizadas por el arqueólogo municipal de Lucena, Daniel Botella Ortega y Jose A. Riquelme Cantal. En el 2009 el doctor Jordi Casanovas  Miró y el arqueólogo Daniel Botella Ortega redactaron un trabajo detallado sobre esta necrópolis judía. 

El ritual de enterramiento era de inhumación en fosa. Las sepulturas estaban orientadas hacia el Este, con los cuerpos en posición decúbito supino, sin ajuar que acompañaba. Las fosas son muy profundas, buscando la tierra virgen, donde deben descansar los difuntos. 

En la tumba número 239 apareció la pequeña lápida del rabino Lactosus. Se trata de una piedra de arenisca local de forma rectangular y bastante gruesa. La superficie rugosa e irregular hizo que la inscripción en hebreo, en caracteres arcaicos, fuera desigual. Los expertos la han fechado hacia la primera mitad del siglo XI. Es decir, en tiempos de máximo apogeo de la ciudad medieval. 

Esta lápida tiene la característica, que está grabada por ambos lados, lo cual da a entender que fue reutilizada, según los expertos, no como lápida sino como elemento estructural de la fosa. La parte inferior, que iba hincada en la tierra ha desaparecido. No muestra decoración alguna. 

La inscripción, sin márgenes, se inicia en el extremo superior derecho con el nombre del difunto "rabí Lactosus" que ocupa casi la totalidad de la primera línea. 

traducción de la inscripción: 

" rabí Lactosus duerme en paz. 
Descanse en paz hasta que venga 
el Consolador (Mesías) 
que anuncie la paz 
en la puerta de la paz ... paz 
Decidle: descansa en paz. "







BIBLIOGRAFIA: 

- El cementerio judío de Lucena (Córdoba). Daniel Botella Ortega y Jordi Casanovas Miró. MEAH, sección Hebreo 58 (2009)